Inés Ruano y Susana Lorenzo fueron las encargadas del discurso del grupo de 2º B
Buenas tardes a todos y a todas:
Por fin ha llegado este día tan esperado por
todos nosotros, el día de nuestra graduación, pensábamos que nunca llegaría.
En primer lugar me gustaría felicitar y dar
gracias: enhorabuena a todos los alumnos que hemos acabado segundo de
bachillerato. Promocionemos o no, todos nos hemos esforzado mucho, hemos
peleado con asignaturas durante mucho tiempo. Este curso ha sido una auténtica
guerra y estoy seguro de que todos hemos dado lo que teníamos para hoy haber
conseguido nuestros objetivos. Aunque no todos empezamos en este centro, la
mayoría sí y nos gustaría echar la vista atrás y recordar estos seis años
vividos. Aún recordamos los nervios del primer día, las ganas de empezar, la
ilusión de conocer gente nueva de las cuáles ahora se han convertido en pilares
fundamentales de nuestras vidas. No nos olvidamos tampoco de esos compañeros
que se han quedado en el camino y de esos profesores que nos han acompañado
durante toda esta etapa que también tienen un lugar en nuestro corazón.
Por otra parte, vemos necesario agradecer a los
profesores y profesoras de este año, por todo su trabajo y ayuda prestada,
reconocemos que de todos ellos hemos aprendido y sacado algo bueno. Hoy debemos
dejar el rencor a un lado. Es un día de reconciliación: ciertamente este curso
no solo ha sido una batalla para los alumnos y las alumnas, también lo ha sido
para ellos y ellas. Han lidiado con nosotros: con nuestra ignorancia, con
nuestra flojera y con nuestros reproches. De manera que también ellos merecen
reconocimiento, de hecho, nos sentimos orgullosos de decir que nos llevamos en
el corazón a algunos profesores y profesoras.
Comenzaremos por nuestro tutor Juan Pan, que
siempre tenía preparado un sermón cuando más desmotivados y desganados nos
sentíamos, por dar la cara por nosotros frente al resto de profesores. Muchas
gracias. Por soportar nuestra negatividad ante la asignatura, por sus intensos listenings
y por “matar” sus pajaritos de la gramática, gracias por no rendirte y seguir
enseñando de manera tan amena, María José. Rafael, quien por ser una persona
tan cercana, por su experiencia y por su constante muestra de pasión por su
trabajo, se ha ganado nuestro respeto y sobretodo, nuestro cariño. En un futuro
te enviaremos algún correo. Muchísimas gracias. David, aunque no lo conocemos
mucho nos ha acompañado en esta última etapa del viaje, gracias. Para ir
finalizando con los profesores comunes, debemos mencionar a Juana, aunque han
sido pocas clases, tus alumnos han aprendido qué es la constitución. Y sobre
todo Rocío Yuste quien ha estado con la mayoría de nosotros desde el principio
de la trayectoria y nos ha visto crecer y en todo momento nos ha transmitido la
buena energía que la caracteriza, gracias por enseñarnos tantos valores que a
veces son más importantes que cualquier materia.
Ahora bien, en cuanto a nosotros, a esta gran
piña de sociales, nos gustaría mencionar a cada uno de nuestros profesores:
Esperanza, gracias por tus infinitas recuperaciones y por soportarnos día a
día. Pepe, por tus “apuntalo en el parte de incidencia”, tus “vamos que hoy va
bien internet” y sobre todo por tus eternos “a la próxima tenéis un retraso”,
gracias por asegurarnos un trabajo en la NASA.A Juan Mancilla y a Isabel, que
no están aquí hoy, gracias. Y a ti, Marisol que a pesar de los malos momentos
que te hemos podido hacer pasar a veces, nos has enseñado aparte de economía el
verdadero significado de la palabra paciencia. Por tus “qué se creéis niños”,
por tu ironía, y tu positividad ante el ambiente de la clase. Sabemos que no te
hemos hecho las clases fáciles, pero a pesar de eso, tú has puesto todo tu
empeño y dedicación en nosotros y aunque no lo creas lo agradecemos mucho.
Muchísimas gracias por tanto apoyo, no te olvidaremos. Y recordad, la piña
puede con todo.
Y ahora es nuestro turno, el de los humanistas,
el turno de este pequeño grupo que se ha convertido en una familia, en una
`tertulia´ como nuestra querida Cande diría. Nuestro recorrido como humanistas
ha sido corto, sí, pero sin duda inolvidable, y por eso antes de agradecer a
nuestros profesores, debemos agradecernos a nosotros mismos por todo esto que
juntos hemos vivido. Antes de comenzar, nos gustaría hacer un pequeño homenaje
a las letras y recordar su gran valor e importancia. Ahora sí, ahora si es
vuestro turno, a los que nos habéis soportado, y a los que vemos con tanta
frecuencia que son como de nuestra familia. Es el turno del terremoto
personificado, la que con Literatura Inglesa y todo esos temas dictados ha
conseguido que tengamos un oído medianamente bueno para el idioma , la que
gracias a esta asignatura nos ha concedido el placer de conocer a la mejor Mery
Joe, que sin duda merece la pena, gracias por todo María José. A continuación
es el turno de hablar de nuestra asignatura más extensa y quizás más
complicada, pero también una de las más bonitas, Historia del Arte, en la que
ha sido nuestro tutor quien ha estado día a día tratando de enseñarnos como se
comenta una obra de arte, por todas tus clases, tu dedicación y ayuda, gracias
Juan. Humanidades es un bachiller de idiomas, donde el griego, el latín, y el
inglés conviven, sin olvidarnos del francés y sus cuatro horas semanales, donde
hemos reído, bailado, cantado, y aprendido muchísimo. Todo gracias a ese soplo
de aire fresco de eterna sonrisa y de eterno color violeta, es decir, gracias a
ti Esperanza, gracias por tu cariño y confianza y por tu apoyo incondicional,
por ese ` je ne sais quoi´ que ha hecho que te apreciemos tanto. Dicen que lo
mejor se deja para el final, que lo bueno se hace esperar, y es que sin duda, a
ti, aunque hoy no puedas estar aquí, tenemos que hacerte una mención mucho más
especial. A ti Candelaria, por ser nuestra segunda madre durante estos dos
años, por todo lo que nos has enseñado y tu dedicación, en el ámbito académico
hemos de darte un enorme gracias, pero también, ya en lo más personal gracias
por ser como eres, y sobre todo por ser clave en esta pequeña familia.
Al igual un agradecimiento para los padres y
madres, nos habéis ayudado, apoyado, sostenido y consolado cuando las cosas no
han salido bien: también vosotros y vosotras tenéis mérito. Habéis aguantado
nuestros más y nuestros menos durante todo este curso. Gracias a vosotros hemos
salido hacia adelante, nos habéis hecho darnos cuenta que con esfuerzo y
constancia todo se puede. Sois el claro ejemplo de aguante, perseverancia y
madurez.
No podemos dejar sin mencionar a nuestras madres
de la cafetería, que también han formado parte de nuestro paso por el
instituto, y nos han quitado más de una pena dándonos un caramelo siempre de
más. Gracias por vuestra eterna sonrisa y por vuestras frases animadoras.
Para finalizar, decir que nunca olvidaremos estos
años pasados en este instituto, por mucho tiempo que pase siempre os llevaremos
en el corazón.
Muchísimas gracias una vez más, ha sido un curso
inolvidable.
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