miércoles, 31 de mayo de 2017

El discurso de Bachillerato de Artes

Leticia, de 2ºC, durante su discurso


Buenas noches.
Estimado director, estimados tutores, profesores; queridos padres y demás familiares: 

Muchísimas gracias por acompañarnos hoy, en un día tan importante y tan esperado para nosotros. Este es el día en el que nos despedimos de un sinfín de cosas: decimos adiós a nuestros profesores y compañeros, a los nuevos y viejos amigos; dejamos atrás una etapa que recordaremos siempre, han sido años en los que nos hemos visto a diario, días sí y días también; nos despedimos muchos de nuestros pueblos para vivir nuevas experiencias en otros lugares. 

Como todos sabéis, como sé yo, este momento del discurso se presenta como aburrido, como un algo intermedio a lo que nos espera esta noche. Pero qué menos que despedirnos como se debe. Esto que afrontamos es un "hasta luego", un "nos vemos pronto". Este discurso no quiero que lo veáis como la felicitación por un buen curso, que también. Me gustaría que hicierais un viaje a este tiempo que hemos dejado atrás y recordéis, porque "los enhorabuena" todos los conocemos, nos lo repiten año tras año. 

En este tiempo, durante nuestro Bachillerato de Arte,  hemos conocido a una persona muy especial. Es él quien nos ha iniciado en el mundo del dibujo y nos ha enseñado técnicas para mejorar, nos ha enseñado a ser persistentes y a no rendirnos a la primera. Gracias a él no hemos tenido tiempo para aburrirnos. Cómo cuando nos pone motes, como "talan" o "follonauta", porque así es él. O cuando nos llama catetos y nos "revolea" lo primero que tiene a mano, ya sea un cúter o un bote de pintura, que si están abiertos mejor. 

Da igual que nos digas que nos odias, sabemos todos que no es posible. Somos encantadores. Echaremos de menos todas tus canciones, y no ellas, sino el verte cantar. A más de uno y una aquí presente le encantaría escucharte. Ojalá no terminara esta etapa, solo por seguir viéndote correr a por folios mientras sigues gritando o cantando. 


Para nosotros has sido nuestro profesor y algo más, como un padre. Nos has ayudado con todos nuestros problemas, nos has apoyado siempre y aconsejado. No queremos que este día termine y que no sepas que te queremos un montón. Eres muy especial para nosotros. Gracias, Martel.

Y bueno, de nuevo daros las gracias a todos, a cada uno de los profesores. Seguro que no os molestáis y solo os ponéis un poco celosos. De verdad, gracias, gracias y gracias. Todas las etapas que vengan a partir de ahora tendrá una base, y será todo lo que nos habéis enseñado. 

Buenas noches, ¡a pasarlo bien!
Leticia



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